Con media taza de esto eliminarás las piedras de los riñones

Las piedras en los riñones o cálculos renales son unas de las enfermedades más dolorosas que puede padecer una persona.

Se generan malestares y molestias en el cuerpo que provocan grandes niveles de dolor mientras se realizan actividades básicas de la vida.

Muchos son los tratamientos que se han desarrollado para tratar esta afección.

Algunos son muy costosos, otros peligrosos y la gran mayoría tiene efectos secundarios que afectan la salud general del paciente.

La mejor opción es siempre tener unos remedios naturales, estos te ayudarán a aliviar los dolores sin ningún riesgo extra.

Además suelen ser muy económicos y fáciles de hacer.

La solución real para tus problemas renales

El mijo es el genoma del sorgo y es utilizado con mucha frecuencia para tratar todas las enfermedades del tracto urinario y de los riñones.

Los beneficios más importantes que tiene este grano en la salud es que ayuda a limpiar y purificar los riñones, porque elimina por completo la mucosidad y la arena, además es muy efectivo en el tratamiento de la cistitis.

Esta receta proviene de Rusia y es uno de los mejores tratamientos naturales que se han conseguido para el tratamiento de todas estas afecciones.

Desintoxica tu cuerpo sin riesgos y sin gastar dinero en exceso.

¿Qué necesitarás para preparar este fantástico remedio natural?

  • 200 gramos (1 taza) de mijo
  • 2 litros (8 tazas) de agua
  • 1 envase de vidrio de 3 litros

¿Cómo se realiza?

Lo primero que se debe hacer es lavar el mijo en un envase limpio con agua tibia. Luego colocar el mijo en el frasco de vidrio y agregar los 2 litros de agua caliente, dejar reposar durante la noche.

A la mañana siguiente verás un líquido blanco en el envase ¡eso es lo que hará el milagro! debes colar y cambiar de envase y eso es lo que tomarás.

Con el mijo resultante puedes preparar una papilla para el desayuno.

Solo necesitas la taza de mijo y 3 tazas de agua, mezcla cocina y en 15 minutos estará lista.

Modo de uso:

Beber el líquido durante todo el día. Preparar en la noche el que se consumirá a la mañana siguiente. Realizar esto durante 10 o 15 días.