Como hacer buñuelos de acelga y que no salgan aceitosos

Los buñuelos de acelga son un delicioso y tradicional platillo que, cuando se preparan adecuadamente, pueden ser crujientes por fuera y tiernos por dentro, sin ser excesivamente aceitosos. Aquí te presento una guía paso a paso para lograrlo:

Ingredientes:
2 tazas de acelga picada
1 taza de harina
2 huevos
1/2 taza de leche
1/2 cucharadita de polvo de hornear
Sal y pimienta al gusto
Aceite para freír
Instrucciones:
Prepara la Acelga: Lava bien las hojas de acelga y córtalas en trozos pequeños. Es importante escurrir bien la acelga para evitar que la masa se vuelva demasiado líquida.

Haz la Masa: En un tazón grande, mezcla la harina, los huevos, la leche y el polvo de hornear hasta obtener una masa homogénea. Agrega la acelga picada y sazona con sal y pimienta. Mezcla bien.

Calienta el Aceite: Usa una sartén profunda y vierte suficiente aceite para que los buñuelos puedan flotar libremente. Calienta el aceite a una temperatura media-alta (unos 180°C). Puedes comprobar si está listo colocando un poco de masa en el aceite; si burbujea y sube a la superficie, está listo.

Fríe los Buñuelos: Con una cuchara, toma porciones de la masa y suéltalas cuidadosamente en el aceite caliente. No sobrecargues la sartén, ya que los buñuelos necesitan espacio para cocinarse uniformemente.

Cocina Hasta Dorar: Fríe los buñuelos hasta que estén dorados y crujientes, lo cual suele tomar unos 3-4 minutos por lado. Evita moverlos demasiado al principio para que no se desarmen.

Escurre el Exceso de Aceite: Una vez dorados, retira los buñuelos con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente. Esto ayudará a eliminar el exceso de aceite.

Consejos para Evitar Buñuelos Aceitosos:
Controla la Temperatura del Aceite: Un aceite demasiado caliente hará que los buñuelos se quemen por fuera y queden crudos por dentro, mientras que un aceite no tan caliente absorberá más grasa.
No Amontones los Buñuelos en la Sartén: Deja espacio entre ellos para que el calor circule adecuadamente.
Usa Papel Absorbente: Siempre drena los buñuelos en papel absorbente después de freírlos.
Servir:
Sirve los buñuelos calientes como aperitivo o acompañamiento. Pueden ser excelentes con una salsa tártara o simplemente con un toque de limón.