¡Increíblemente esponjoso y delicioso! Descubre el secreto de nuestro Bizcochuelo de leche.

El bizcochuelo de leche es un pastel esponjoso y suave que sirve como base perfecta para una variedad de postres. Ya sea que lo disfrutes solo, con frutas frescas o como base para una torta rellena, este bizcochuelo es una receta clásica que todo amante de la repostería debería saber hacer. Aquí te mostramos cómo preparar un delicioso bizcochuelo de leche.

Ingredientes:

  • 4 huevos
  • 1 taza de azúcar (200 g)
  • 1 taza de harina de trigo (120 g)
  • 1/2 taza de leche (120 ml)
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 1 cucharadita de polvo de hornear

Instrucciones:

  1. Preparar el horno y el molde: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Engrasa y enharina un molde para bizcochuelo de 20 cm de diámetro o fórralo con papel de hornear.
  2. Batir los huevos y el azúcar: En un bol grande, bate los huevos con el azúcar usando una batidora eléctrica a velocidad alta durante unos 8-10 minutos, hasta que la mezcla esté espesa y de color claro. Esto es esencial para lograr un bizcochuelo esponjoso.
  3. Añadir la leche y la vainilla: Reduce la velocidad de la batidora y agrega la leche y la esencia de vainilla, mezclando hasta que se integren bien.
  4. Incorporar la harina y el polvo de hornear: Tamiza la harina junto con el polvo de hornear y añádelos a la mezcla de huevos, poco a poco, mezclando suavemente con una espátula y movimientos envolventes para no perder el aire incorporado durante el batido.
  5. Hornear: Vierte la mezcla en el molde preparado y hornea durante aproximadamente 30-35 minutos o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio. Evita abrir el horno durante los primeros 20 minutos de cocción para que el bizcochuelo no se baje.
  6. Enfriar y desmoldar: Una vez que el bizcochuelo esté listo, retíralo del horno y déjalo enfriar en el molde durante unos 10 minutos. Luego, desmóldalo y colócalo sobre una rejilla para que se enfríe completamente.
  7. Servir: Una vez que el bizcochuelo esté frío, puedes cortarlo en capas y rellenarlo con crema, dulce de leche, mermelada o lo que prefieras. También puedes espolvorear azúcar impalpable por encima para decorar.

Este bizcochuelo de leche es ligero, esponjoso y delicioso, perfecto para cualquier ocasión. Disfrútalo como postre o como una dulce merienda. ¡Buen provecho!