Cómo hacer mayonesa de garbanzo casera: Una alternativa saludable y deliciosa

La mayonesa de garbanzo es una excelente alternativa vegana a la mayonesa tradicional hecha a base de huevo. Es cremosa, sabrosa y perfecta para añadir a ensaladas, sándwiches o como un dip para verduras frescas. Aquí te explicamos cómo hacer tu propia mayonesa de garbanzo casera con ingredientes simples y en pocos pasos.

Ingredientes

  • 1 taza de garbanzos cocidos (escurridos y sin piel para una textura más suave)
  • 1 diente de ajo, pelado
  • El jugo de 1 limón grande
  • 1 cucharada de mostaza Dijon o mostaza amarilla
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 3/4 taza de aceite de oliva o aceite de girasol
  • 2 cucharadas de agua (opcional, para ajustar la consistencia)

Instrucciones

  1. Preparación de los ingredientes: Comienza preparando los garbanzos. Si usas garbanzos de lata, asegúrate de escurrirlos bien y quitarles la piel para obtener una textura más fina. El ajo debe estar pelado y puedes cortarlo un poco para facilitar el proceso.
  2. Mezclar los ingredientes básicos: En el vaso de una licuadora o un procesador de alimentos, combina los garbanzos, el diente de ajo, el jugo de limón, la mostaza y la sal. Procesa hasta que todos los ingredientes se hayan mezclado y formen una pasta.
  3. Emulsionar con aceite: Mientras la licuadora o procesador está en funcionamiento, añade el aceite poco a poco. Esto ayudará a emulsionar la mezcla y a que se forme una crema suave y homogénea. Si la mezcla parece muy espesa, puedes añadir un poco de agua para ajustar la consistencia.
  4. Ajustar el sabor: Prueba la mayonesa y ajusta el sabor si es necesario, añadiendo más sal, limón o ajo según tu preferencia.
  5. Refrigeración: Una vez terminada, transfiere la mayonesa de garbanzo a un recipiente hermético y refrigérala. Deja que repose al menos una hora antes de usarla para permitir que los sabores se mezclen bien. La mayonesa de garbanzo casera puede conservarse en el refrigerador durante aproximadamente una semana.

Consejos y variantes

  • Para una versión sin aceite, puedes omitir el aceite y añadir un poco más de agua o aquafaba (el líquido de cocción de los garbanzos) para obtener la consistencia deseada.
  • Experimenta con diferentes sabores añadiendo ingredientes como albahaca fresca, perejil, pimentón ahumado o cúrcuma para obtener variaciones coloridas y sabrosas.
  • Esta mayonesa también puede ser la base para un aderezo cremoso si se le añade un poco más de agua y se ajustan las especias.

Hacer tu propia mayonesa de garbanzo no solo es una opción saludable y libre de ingredientes animales, sino que también te permite experimentar con sabores y texturas, ajustándola exactamente a tu gusto. Pruébala y descubre una nueva forma de disfrutar tus comidas con un toque casero y nutritivo.