Arroz con Leche Casero: Un Dulce Clásico y Reconfortante

El arroz con leche es un postre tradicional que se disfruta en muchas culturas alrededor del mundo. Su textura cremosa y sabor dulce lo convierten en el final perfecto para cualquier comida o en un delicioso tentempié a cualquier hora del día. Aquí te presentamos una receta sencilla y deliciosa para hacer arroz con leche casero.

Ingredientes:

  • 1 taza de arroz de grano corto (como arroz para sushi o arroz Arborio)
  • 4 tazas de leche entera
  • 1 taza de azúcar
  • 1 rama de canela
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • La cáscara de 1 limón (solo la parte amarilla)
  • Canela en polvo para espolvorear (opcional)

Instrucciones:

  1. Preparar el arroz:
    • Enjuaga el arroz bajo agua fría hasta que el agua salga clara. Esto ayudará a eliminar el exceso de almidón y hará que el arroz con leche quede más cremoso.
  2. Cocinar el arroz:
    • En una olla grande, combina el arroz enjuagado con 2 tazas de agua. Lleva a ebullición, reduce el fuego y cocina a fuego lento, tapado, durante unos 15 minutos o hasta que el agua se haya absorbido y el arroz esté tierno.
  3. Agregar la leche y los aromatizantes:
    • Añade la leche, el azúcar, la rama de canela y la cáscara de limón a la olla con el arroz. Mezcla bien y cocina a fuego medio-bajo, sin tapar, durante unos 25-30 minutos. Remueve ocasionalmente para evitar que el arroz se pegue al fondo de la olla y para ayudar a que la mezcla se espese.
  4. Finalizar el arroz con leche:
    • Una vez que el arroz con leche haya alcanzado una consistencia cremosa, retira la olla del fuego. Agrega el extracto de vainilla y mezcla bien. Retira la rama de canela y la cáscara de limón.
  5. Servir:
    • Sirve el arroz con leche caliente o déjalo enfriar a temperatura ambiente y luego refrigéralo si prefieres servirlo frío. Espolvorea un poco de canela en polvo sobre cada porción para darle un toque extra de sabor y aroma.

El arroz con leche casero es un postre versátil que puedes personalizar a tu gusto. Puedes agregar pasas, frutos secos picados o incluso un toque de licor para una versión más adulta. Sea cual sea la variante que elijas, este dulce clásico seguramente traerá calidez y confort a tu mesa.